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Blog oficial de la escritora Raquel Sánchez García
"Escribir es mi vida y mientras exista una persona a la que mis letras le entretengan, pondré todo mi empeño en intentar convertirme, a través del papel, en un complemento de su felicidad" (Raquel Sánchez García)

"El mundo está lleno de puertas cerradas y nosotros nacimos para abrirlas todas" (Matilde Asensi)

Obras publicadas de Raquel Sánchez García

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domingo, 25 de enero de 2009

Tregua

Después de la escena que habían ofrecido ambos, tanto Alicia como Raúl, estaban consternados. Alicia se encerró en la habitación llorando, tiró la ropa que había adquirido con Máximo en la silla del escritorio y se abalanzó sobre la cama. Las lágrimas brotaban por su rostro sin consuelo.

 - ¿Pero qué estará pensando sobre mí?, yo no he hecho nada malo, ¿por qué me recrimina así?, ¿qué le pasa? Parece como si estuviera celoso, por lo que puedo deducir le ha molestado que me fuera con Máximo y no me quedara con ellos el resto de la sobremesa. ¿Qué hago ahora? – se repetía Alicia.

Raúl se había ido furioso a su habitación, Toni intentó en varias ocasiones hablar con él pero desde dentro le gritó que le dejara, que no quería ver a nadie, incluso se cerró por dentro, cosa que nunca hacía, a no ser que estuviera acompañado y quisiera algo de mayor intimidad. Toni empezó a elucubrar si aquella noche que había estado en casa de su hermana habría ocurrido algo entre ellos dos y por eso ahora estaban así, era la única explicación que tenía todo aquel atolladero.

domingo, 4 de enero de 2009

El Paso del Tiempo

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Era su último día. Tres décadas de su vida invertidas en el que Ramiro siempre reconocería como el mejor hotel de Madrid, y probablemente del de España. La verdad, no le importaba que esa afirmación fuera mentira, era lo que él sentía en su interior desde la primera vez que puso su pie en el hotel, aun en época de Franco.

Encargarse del mantenimiento del hotel siempre fue su gran pasión, aunque tenía que reconocer que en los últimos años se había quedado muy caduco con las nuevas tecnologías, por eso se jubilaba con solo sesenta años. Total, lo que le quedaba de existencia tenía pensado pasarla en el bungalow que había comprado en La Mata. Él quería un retiro lo más tranquilo posible, y Sofía tenía ganas de alejarse del a la vez infernal y divino bullicio de Madrid. Por tanto, no sería este su último día como trabajador en el Palace, sino también la última vez que lo vería con vida.